“A juicio de la Asociación Empresarial Eólica -ha explicado Polo-, las medidas adoptadas a través de la Reforma Energética no responden a la lógica económica. Un claro ejemplo es que la tecnología más castigada es la más barata [en referencia a la eólica]. Los cambios normativos que se proponen son retroactivos y discriminatorios, vulneran los principios de buena regulación y suponen un grave ataque contra la seguridad jurídica". En definitiva -ha añadido-, la AEE "considera inadmisible el trato que se le da a la eólica, sin duda, la tecnología más penalizada por la reforma energética".
Una de cada cuatro instalaciones, sin prima
El director general de la asociación ha criticado además muy duramente, y entre otras cosas, el hecho de que las instalaciones eólicas anteriores a 2004 –el 28% del total– no tengan derecho "a ningún tipo de incentivo". La nueva normativa -ha dicho- "tendrá, sin duda, un fuerte impacto en la industria eólica, una de las más innovadoras y con más futuro de España, lo que traerá consigo deslocalizaciones, nuevos despidos, refinanciaciones y un sinfín de efectos perversos. AEE expondrá a sus asociados todas las opciones legales a su alcance para actuar contra esta reforma y obrará conforme a lo que los socios decidan”.