La primera decisión de la CNMV era suspender la negociación de las acciones “por concurrir circunstancias que pudieran perturbar el normal desarrollo de las operaciones sobre los citados valores.” La segunda, la vuelta a los mercados, “como consecuencia de haber sido puesta a disposición del público en las Sociedades Rectoras de las Bolsas de Valores y en la CNMV información suficiente de las circunstancias que aconsejaron la adopción del acuerdo de suspensión.”
¿Qué ha sucedido entre la suspensión de cotización y la vuelta al parqué? Entre la primera y la segunda comunicación el Consejo de Administración de Solaria Energía y Medio Ambiente, a petición de la CNMV ha considerado necesario modificar el resultado individual y consolidado del ejercicio 2011 y reformular las cuentas anuales. “El resultado individual de la sociedad ha sido ajustado desde una pérdida después de impuestos de 47,393 millones de euros a una pérdida después de impuestos de 92,053 millones”.
Asimismo, “el resultado consolidado del Grupo Solaria (del que Solaria Energía y Medio Ambiente, S.A. es su sociedad dominante) ha sido ajustado desde una pérdida después de impuestos de 40,942 millones de euros a una pérdida después de impuestos de 96,320 millones de euros”.
Según explica Solaria en la comunicación enviada al supervisor del mercado bursátil, la “modificación, principalmente basada en ajustes en las valoraciones de activos, es consecuencia de la profundización en la adopción de criterios conservadores y de prudencia en el marco de la crisis económica global y la nueva situación del mercado fotovoltaico (internacional y doméstico)”.
Solaria ha convocado una Junta General de Accionistas para el próximo 30 de junio.
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