Los recortes se dan por hechos después de que en el Bundestag votaran a favor de ellos los cristianos demócratas de la CDU y la CSU, y los liberales del FDP. Ningún argumento ha servido para cambiar los planes del gobierno de Angela Merkel. La oposición política ha alertado del peligro de insolvencia que supondrá para la industria fotovoltaica alemana y ha acusado al ejecutivo de no tener voluntad de cambiar el sistema energético germano basado en las energías fósiles por otro que se sustente en las energías renovables
Tampoco para haber conmovido en absoluto el ánimo del gobierno de Berlín la carta enviada a la canciller por las asociaciones solares de 15 países en la que manifestaban su preocupación por la drástica reducción de las tarifas. La misiva, desvelada por Energías Renovables, está fechada el 29 de febrero y firmada por asociaciones de Polonia, Suecia, Holanda, Italia, Austria, Gran Bretaña, Eslovenia, Grecia, Croacia, Portugal, Bulgaria, Eslovaquia, Francia, Estados Unidos y España. Por nuestro país el firmante es ASIF, la Asociación de la Industria Fotovoltaica.
Recorte de un 30%
El proyecto de ley propuesto por el ministro de Medio Ambiente, y que cuenta con el beneplácito del ministro de Economía, plantea una reducción de la tarifa de entre el 20 y el 30% en abril de 2012. Y eso para empezar. A partir de mayo se producirá una reducción progresiva cada mes. Los recortes irán en función del tamaño de la planta, y a partir de 10 MW no recibirán remuneración. Otro de los aspectos que recoge el plan del gobierno es que solo un porcentaje de la electricidad producida tendrá derecho a cobro.
Estas iniciativas se producen después de que en 2011 se instalasen 7,5 GW fotovoltaicos, una potencia muy superior a los planes del gobierno, que esperaba entre 2.5 y 3,5 GW. La decisión de bajar las primas responde al interés de reducir el crecimiento de nuevas instalaciones solares.
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