De la lectura del comunicado hecho público por la CNE se puede entender que ha habido debate intenso. El informe ha sido aprobado por todos los consejeros y la abstención del presidente, Alberto Lafuente, cuyo voto particular será enviado al Ministerio de Industria y se publicará en la página web de la CNE.
El informe, explica la CNE, contiene “medidas de ajuste regulatorio que se pudieran adoptar en los sectores energéticos, en particular, dirigidas a atajar la evolución del déficit tarifario en el sector eléctrico y evitar un posible déficit estructural para el periodo 2012-2016 en el sector del gas. En la elaboración de este informe también se han valorado posibles medidas para fomentar la competencia y el funcionamiento eficiente de los mercados mayoristas y minoristas de electricidad y gas”.
La elaboración de las medidas de ajuste responde al un mandato realizado en este sentido de la Secretaría de Estado de Energía. Durante el proceso de redacción del documento la CNE abrió una consulta pública. Se recibieron más 500 propuestas observaciones y propuestas de reforma. Los sectores eólico, fotovoltaico y termoeléctrico realizaron las suyas.
Según los datos hechos públicos por la CNE, se presentaron 477 respuestas al cuestionario sobre el sector eléctrico, de las cuales más de 200 procedentes de particulares; hubo 68 respuestas al cuestionario sobre el sector gasista, de las cuales unas 13 procedían de particulares; y 42 respuestas al cuestionario sobre el sector de hidrocarburos líquidos, de las cuales unas 20 procedían de particulares.
El informe elaborado y remitido al Ministerio de Industria tiene valor consultivo, en ningún caso es vinculante. Será el gobierno el que decida los ajustes regulatorios y las medidas para acabar con el déficit tarifario.
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