En declaraciones a la Cope, recogidas por la agencia Efe, Soria aseguró que la apuesta del Gobierno será que las renovables, “que son las energías más caras”, sigan teniendo un importante peso en el mix de generación eléctrica de España "pero sabiendo que comportan un extracoste que ha de pagar alguien: o el Estado o los consumidores o una parte las eléctricas".
"Si el Estado no tiene recursos, porque tiene cada vez menos, si los consumidores no desean que se incorporen a las tarifas y si las eléctricas tampoco quieren, es evidente que tendremos que llegar a un acuerdo entre todos para ver lo que hacemos", dijo Soria, quien avanzó que esta cuestión centrará su trabajo en el terreno energético durante las próximas semanas.
Añadió que el Gobierno tiene que intentar taponar la "hemorragia financiera" que se está produciendo como consecuencia del actual modelo energético de España y que ha derivado en un déficit de tarifa de 24.000 millones de euros.
"Eso supone cambiar el modelo. El Gobierno no desea hacerlo de forma unilateral. Queremos contar con las eléctricas, las distribuidoras y los consumidores", aseguró Soria, quien dijo que si no se toman medidas, en cuatro o cinco años, se duplicará el déficit de tarifa, que se genera porque los ingresos por venta de electricidad no cubren los costes de producción.
En paralelo a la reforma del sistema, hay que dar una solución a la deuda acumulada, para lo que ya ha empezado a hablar con los responsables de las compañías eléctricas, apuntó.
En cuanto al recibo de la luz, Soria reiteró que éste se ha congelado porque el coste de la energía ha bajado y se ha podido subir así el otro componente de la tarifa eléctrica, los peajes, que son los que remuneran costes regulados como el transporte o la distribución.
El ministro señaló que no se puede garantizar que en el futuro esto se vuelva a repetir, en primer lugar por el déficit de 24.000 millones de euros acumulado durante los siete últimos años y en segundo lugar porque no se sabe cómo va a evolucionar la próxima subasta de energía, que está muy relacionada con el precio del petróleo.
Soria también se refirió al sector del carbón y abogó por tener en cuenta la realidad social de las comarcas mineras y hacerla compatible con la apuesta por las renovables.
Por otra parte, insistió en la necesidad de dotar de más independencia a la Comisión Nacional de la Energía y a la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones.