Los investigadores de IHS creen que la instalación anual de nueva capacidad FV se reducirá a menos de la mitad de los 15 GW agregados en 2011. Esta caída en la actividad la atribuyen a las importantes reducciones en los incentivos del sistema de primas y al realineamiento de las políticas FV a largo plazo, dentro del contexto de los programas de austeridad de los gobiernos de toda Europa.
"El crecimiento FV europeo está centrado en unos pocos países, y esto acentúa la sensibilidad del mercado ante los cambios", señala el informe.
Alemania continúa siendo el motor de Europa en cuanto al crecimiento a largo plazo, con el 58 por ciento de la capacidad FV instalada. Pero, según indican los analistas, "en 2011 Alemania cederá ligeramente su posición de liderazgo a Italia, que está a punto de añadir 8 GW, impulsada por los rápidos cambios en las políticas y por la especulación".
"Además de estos dos mercados sin rivales, un puñado de países experimentarán importantes despliegues de capacidad FV de más de 200 MW al año", añaden.
No obstante, el informe concluye que este proceso europeo de contracción y realineación conducirá a un crecimiento más estable y a largo plazo para el mercado FV, ya que la región se convertirá en parte de una industria FV global más equilibrada y más diversa desde el punto de vista geográfico.
Disparidad de costes
Los analistas de IHS señalan en el informe que los costes de los sistemas FV muestran una amplia disparidad a lo largo de Europa, pero se espera que éstos converjan al tiempo que el mercado madure.
"Hasta la fecha, Alemania es el mercado más eficiente. La variación de costes se debe principalmente a los incentivos ya que todos los actores implicados en la cadena de valor adaptan los precios según los retornos esperados por el proyecto. Mientras los incentivos se reducen y descienden, los actores implicados aumentan su eficiencia, y los costes de sistema continúan bajando", dice el informe.
En 2011, ha habido una tendencia hacia la convergencia de precios entre países, especialmente en el sector de los servicios públicos, con un coste promedio en Europa de 2,31€/kW. para un sistema completo de una instalación FV en tierra.
Los sistemas comerciales en tejados tienen un coste promedio de 0,43€/W más que las instalaciones en tierra, lo que representa un descenso del 41 por ciento desde los 0,74€/W en 2009. Las tendencias regulatorias indican un cambio hacia las instalaciones en tejados y hacia los sistemas FV integrados en edificios, por lo que se espera que se reduzcan los costes de estas instalaciones a corto plazo.
Según indica el informe, el principal factor para la reducción de costes es la evolución de los precios de los módulos, ya que éstos representan aproximadamente el 50 por ciento del coste del sistema. A pesar de unos menores incentivos, a medida que la industria FV reduzca cada vez más los costes y establezca economías de escala, se espera que la penetración de la energía FV continúe en los mercados europeos.
El enfoque normativo empuja las instalaciones en tejados
Las nuevas instalaciones FV en tejados han tenido una menor participación en 2011 en el conjunto del mercado: un 60% frente al 80% en 2009, debido en gran parte a que Italia se ha centrado en las instalaciones en tierra, indica el informe.
En el futuro, se espera que esta participación repunte hasta estabilizarse en torno al 90 por ciento. El principal motor de esta concentración de instalaciones en tejados son los 11 países europeos que están impulsando el despliegue de los sistemas en tejados a través de sus legislaciones.
"Además, mientras los organismos reguladores de toda Europa reducen sus primas, las tarifas para instalaciones en tejados se están revisando de forma menos drástica que para los sistemas en tierra", agrega el informe. "Esta tendencia refleja la convicción de los gobiernos de la idoneidad de los sistemas FV a largo plazo en instalaciones en tejados y de las aplicaciones para la generación distribuida”.
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