La Asociación Española de Fabricantes de Iluminación ha presentado hoy en Madrid el informe “LED’s y su influencia en la eficiencia energética en España”. Según los datos obtenidos mediante encuestas al 70% de las empresas productoras, el mercado ha ido en aumento en los últimos años hasta suponer un 24% de la facturación total del sector, e incluso se espera llegar a un 40 o un 50% después de la crisis. A este respecto, el presidente de Anfalum, Rafael Barón Crespo ha señalado que “si el mercado sigue su curso en 2020, el 60% de las luminarias suministradas en el mercado podrían ser LED’s”.
Este crecimiento vendrá marcado por las múltiples ventajas que presentan estas luminarias -cuyas siglas, en inglés, significan Diodo Emisor de Luz- con respecto a las tradicionales, pero siempre y cuando se tengan en cuenta los criterios técnicos, la calidad del producto y la garantía del fabricante. “La eficacia de la implantación de la tecnología LED tiene que ir de la mano de fabricantes de prestigio, que son los que pueden ofrecer las garantías necesarias para realizar el cambio propuesto sin olvidar aspectos como la economía, la racionalidad y el bien hacer”, ha añadido Barón.
Hacer una planificación previa que incluya procesos de validación técnicos, realizados por firmas con profesionales cualificados que pueden ofrecer garantía de los productos suministrados, es clave para el desarrollo y buen funcionamiento de esta nueva tecnología. Desde la asociación se ha insistido también en la necesidad de utilizar productos que provengan de “empresas de calidad contrastada y con vocación de permanencia en el mercado”, y se ha dado la voz de alarma ante el intrusismo profesional que vive el sector, la actividad pirata y el oportunismo de empresas que han proliferado en los últimos tiempos, especialmente con la puesta al día de las iluminaciones públicas de los ayuntamientos, y que suponen una merma de las ventajas reales de los LED’s.
Falta legislación, sobran primas
Así mismo, se ha señalado la importancia de que la administración asuma un papel ejemplarizante, evitando buscar oportunidad de negocio y ejerciendo una correcta gestión de la eficiencia energética y una buena aplicación de una nueva tecnología como es el LED”. En este sentido, Benito Rodríguez, vicepresidente de Anfalum, ha comentado el inconveniente que pueden suponer las primas y la falta de legislación para una tecnología muy novedosa como ésta”.
Según Barón, “la vida útil de una luminaria LED es entre tres y cuatro veces mayor que las de las fuentes de luz tradicionales, peros sus ventajas vienen determinadas por un adecuado diseño previo de las instalaciones con el que se puede llegar a una durabilidad mayor de 50.000 horas”. De hecho, para llegar a cumplir los objetivos marcados por la Unión Europea (UE) para 2020 -y que suponen alcanzar una reducción del 20% en el consumo eléctrico- es necesario adecuar las instalaciones. Así, Barón ha señalado que “el 75% del parque de viviendas en España debería adecuarse”. Esta reducción permitiría aumentar la seguridad del suministro, reducir el cambio climático y generar recursos.
Más duraderas y direccionables
Entre las características de los LED’s destaca una mayor durabilidad, una eficacia luminosa de entre 80/140 Lm/w (lumen por vatio), un encendido instantáneo y la posibilidad de poder dirigir mejor la dirección de la luz. El coste de la instalación es similar a la tecnología actual y, aunque el precio de una luminaria LED es aproximadamente entre tres y cuatro veces mayor que las tradicionales, su amortización oscila entre los 3 y los 7 años.
La tecnología LED se usa principalmente en instalaciones interiores y exteriores, como por ejemplo en el alumbrado público, y fundamentalmente en hoteles, restaurantes y cafeterías, aunque su uso está aumentando también en establecimientos con gran tránsito de personas, como hospitales, colegios y centros comerciales.
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