El Plan de Acción Nacional de Energías Renovables de España 2011-2020 (PANER) lo especificaba bien claro: el objetivo asignado a las energías renovables en el transporte era del 13,6% en 2020, con un 12,7% en 2019 y un 12% en 2018. También era claro en la cuota global de fuentes renovables para la misma fecha: 22,7%. En estas llega el Plan de Energías Renovables 2011-2020 (PER) con las rebajas y fija el objetivo general en el 20,8% y el del transporte en un 11,3%, con lo que no se alcanza ni siquiera la cifra de 2018 del PANER. Tanto este plan como el PER otorgan a los biocarburantes una cuota de entre el 85 y el 90% del total de participación en el transporte.
Los datos del PER están sacados de un resumen del borrador y, lógicamente, hasta que no se apruebe no tendrán carácter definitivo y legal. Con estas cautelas, la sección de Biocarburantes de la Asociación de Productores de Energías Renovables (APPA) ha declarado a Energías Renovables que valora negativamente la reducción entre uno y otro plan. “Esta rebaja –afirman– no está en línea con los objetivos de reducir el consumo de combustibles fósiles en el sector del transporte, diversificar las fuentes de energía primaria, incrementar la seguridad de abastecimiento energético y asegurar mayores reducciones de emisiones de gases de efecto invernadero establecidos en el propio borrador del PER”.
Los biocarburantes de segunda generación aportarán 250 ktep en 2020
Si se hacen cálculos más ajustados, tenían más participación los biocarburantes destinados al transporte en el PANER (cercana al 90%) que en el PER (en torno al 85%). En concreto, este último les otorga una participación de 2.713 kilo-toneladas de petróleo (ktep), a las que se suman las 501 ktep de la electricidad procedente de fuentes renovables. El biodiésel aportaría la mayor cantidad (2.313 ktep) y el bioetanol sustancialmente menos (400 ktep). El PER 2011-2020 también fija la cantidad que debe proceder de biocarburantes de segunda generación, que en el caso del biodiésel será de 200 ktep y en el del bioetanol de 52 ktep.
A pesar de esta reducción de objetivos, APPA Biocarburantes sí valora positivamente “la inclusión en el borrador del PER de un catálogo de medidas normativas para superar las barreras que frenan el desarrollo de los biocarburantes –especialmente para la extensión de las mezclas etiquetadas– que resulta más completo y consistente que el incluido en el PANER”. Entre medidas normativas en general, las relativas a la subvención de proyectos y actuaciones, las de aumento de la presencia de biocarburantes en la logística de hidrocarburos y las de apoyo a iniciativas de I+D+i se cuentan cerca de dos decenas a lo largo del texto.
APPA Biocarburantes habla de un 4,83% en 2010 y de un 61% de importación de biodiésel
Por último, APPA Biocarburantes ha presentado una versión definitiva del balance de biocarburantes en 2010. Como primer dato, se apunta que el consumo alcanzó en 2010 una cuota de mercado en términos energéticos del 4,83%, ligeramente mayor que el 4,79% anunciado por la CNE la semana pasada, pero siempre menor que el objetivo obligatorio del 5,83%. También hay ligeras diferencias al alza en el caso concreto del biodiésel (5,02% frente al 5% de la CNE) y del bioetanol (4,03% frente al 3,88%). Este último porcentaje es más significativo, ya que con las cifras de APPA Biocarburantes se cumple el objetivo particular del bioetanol, que está fijado en el 3,9%.
Otros de los datos contenidos en el informe hace referencia a las importaciones de biodiésel, que rozaron las 825.000 toneladas, lo que representó el 61% del consumo en España, cuota de mercado que, según APPA Biocarburantes, “se sitúa en la media de la de los años anteriores, confirmando el claro dominio que el biodiésel extranjero ejerce en el mercado nacional desde 2007”. En concreto, confirman que las importaciones de Argentina fueron en 2010 más del doble que las contabilizadas en el año anterior y supusieron el 53% del total. Las importaciones de bioetanol aumentaron en términos absolutos y relativos, alcanzando una cuota de mercado del 44%, muy superior a la de 2009 (29%).
En cuanto a la capacidad instalada de biodiésel, se situó en casi 4,4 millones de toneladas, repartidas en un total de 48 plantas, y el ratio de utilización subió al 25%, superando el 15% de 2009. Una ratio mayor presentó el bioetanol. La capacidad instalada en 2010 se mantuvo estable respecto al año anterior, superando las 464.000 toneladas, repartidas en un total de 4 plantas, y la ratio de utilización de esa capacidad estuvo en el 80%, porcentaje muy similar al de 2009, concluyen desde APPA Biocarburantes.
